Hace muchos, muchos años, cuando las películas de Harry Potter comenzaron a ponerse de moda, el éxito de ese libro y su adaptación cinematográfica levantó un movimiento en que las casas productoras pensaron que cualquier historia que involucrara niños, fantasía y viniera de un libro tendría el mismo éxito. Así llegaron varias películas intrascendentes, El Mundo Mágico de Terabitia fue una de muchas, y una de las más meh que salieron, pero algo me llamó la atención.
AnnaSophia Robb fue la “chica mágica” de esa película y al verla inmediatamente pensé: “esta niña se va a poner buena”. Y así fue pues ya muchos años después se puso bastante bonita.
Anna (de actualmente 22 años, lo que la hace legal), es una de esas chicas rubias que tanto me gustan, delgada, elegante y poco popular (oye, en un mundo dominado por Scarlett Johansson Anna es definitivamente poco popular).
La chava no ha sido muy exitosa como actriz, después de esa de Terabitia participó en algunas películas pequeñas, siendo La Montaña Embrujada (que se volvió meme) y Soul Surfer lo más “exitoso” en su filmografía. Afortunadamente para ella aquí no valoramos sus logros artísticos sino algo mucho más personal… a su persona (o sea su cuerpo).
Anna es rubia, de apariencia clásica, definitivamente parece niña buena. En ciertas imágenes bien pudiera parecer un poco “alien” debido a sus grandes ojos azules. También tiene la cara un poco asimétrica y muy angulada, características que la hacen más reconocible y… “alienígena”.
Anna es una chava muy bonita que es una lástima que no aparezca más seguido en el cine; también, al igual que Emma Watson, es un caso de chica bonita e inteligente pues estudia en Stanford. Esperemos próximamente ya haga algo en el cine.
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