Por primera vez en mi vida he entrado a la nueva generación de consolas durante su primer año de vida, eso es algo que no realicé en generaciones anteriores puesto que prácticamente todas mis consolas las tuve a partir del primer año, sin embargo no pude resistir el hype y realicé el esfuerzo.

Aunque reconozco que a nivel de exclusivas Playstation es una consola superior, debido a que mis amigos se hicieron también de un Series X, o al menos piensan en comprar esa consola por sobre el Playstation 5, decidí continuar con Microsoft como mi consola principal, como ha venido siendo desde los tiempos del Xbox 360, siendo Xbox la consola donde juego los títulos multiplataforma mientras que Playstation se limita a los exclusivos.
Antes de comenzar a hablar del Xbox Series X te comento que vengo de la evolución del Xbox One por lo que me he incrementado de forma gradual, tuve el Xbox One fat, después el Xbox One S y finalmente el Xbox One X, por esa razón sí he disfrutado juegos en 4K así que el brinco generacional no me es tan notorio.

Lo primero que hay que destacar es que el Xbox Series X es una consola bastante fea, visualmente me pareció desagradable desde su introducción pero verla en mi mueble de tv, en el sitio donde antes estuviera la sexy Xbox One X la verdad me deja con sentimientos encontrados tras reemplazar la consola anterior. Xbox Series X tiene el atractivo visual de un refrigerador, y no de uno bonito, es una consola gorda, pesada y estorbosa, colocarla en vertical además me causa algo de temor de tumbarla accidentalmente y el cable de alimentación es bastante corto, por lo que no permite muchas configuraciones debido a ello. La apariencia definitivamente no es una cualidad del Xbox Series X

La caja es voluminosa como fuera antes la del Xbox One Fat, ese es otro detalle desagradable pues la caja del Xbox One X se acomodaba perfectamente en mi almacén, al lado del resto de mis consolas, mientras que la caja del Xbox Series X debe colocarse aparte por causa del enorme tamaño.
Al interior está sumamente simple el acomodo, se encuentra el bloque de la consola al centro y, de entrada, pareciera que se les olvidó el control, resulta que tanto el control como los cables se encuentran bien escondidos en un rincón de la caja. Fuera de esos aditamentos el Xbox Series X es una consola que llega en condiciones tristes de austeridad, esta vez no incluyen diadema para chat de voz ni tarjetas de Xbox Live o Gamepass gratuitas por la compra.

Como mencioné el cable de corriente es sumamente corto, por su parte el cable HDMI es exactamente igual al del Xbox One X, desconozco si es internamente más capaz pero en apariencia es lo mismo.
Lo que sí me gustó es el control, es un poco más pequeño y la textura de las agarraderas es más notoria, lo que da mejor soporte. Los gatillos y bumpers los sentí bien y me pareció que el tamaño es muy cómodo en las manos; me preocupaba que el ser más chico lo volviera incómodo pero de hecho sostenerlo genera menos presión en las manos que los controles anteriores.
Lo más notorio del nuevo control es el pad, el cual me causaba cierta preocupación por su diseño extraño; resulta que es bastante cómodo y responsivo, muy agradable pues nunca me adapté al 100% al pad del Xbox One; este nuevo pad es similar al del Xbox 360 pero menos “bailarín” y lo he encontrado muy funcional. Puse The King of Fighters 98 para probarlo y me dio gusto ver que volví a sacar los combos que antes hacía en PS2 y Xbox 360 pero que en Xbox One comenzaron a fallarme a causa del pad.

Una vez encendida la consola la diferencia respecto del Xbox One X es tan mínima que asusta; es como si en ningún momento hubieras cambiado de sistema. Aunque el HUD se ve más nítido y los cuadros ligeramente más grandes, poco varía respecto del anterior.
Una vez que lanzas los juegos es donde podemos notar cambio, aunque de momento no es un cambio tan sustancial en lo visual.
Debo aclarar que no soy rico, de hecho todo lo contrario, mi sueldo es limitado y por ello compro juegos en oferta la mayor parte del tiempo; por ello de momento no cuento con juegos optimizados realmente para Xbox Series X, salvo Gears 5, que fue regalado por Games with Gold y del que hablaré en un momento.
Por supuesto que empecé con los títulos que ya tenía en puerta, los cuales al momento son Resident Evil 3 Remake e Injustice 2; asimismo lo probé con mis clásicos como el FIFA más reciente que tengo, que es el 2020, así como con Dragon Ball FightersZ, Battlefield V y el mencionado King of Fighters 98, el cual es de Xbox 360 y se ve igual que siempre.
Debo decir que gráficamente, viniendo de Xbox One X, no noto diferencia alguna en los juegos que he probado en Xbox Series X; Injustice se ve un poco más vivo en los colores, lo mismo se puede decir para Dragon Ball Fightersz; pero fuera de ello es el mismo juego. Resident Evil 3 Remake ya se veía gráficamente hermoso en el Xbox One X y no noté mejora alguna en ese apartado, lo mismo en FIFA 20 y Battlefield V, se ven idénticos que antes.

Sin embargo donde sí noté una diferencia importante es en los tiempos de carga, los cuales son algo realmente sustancial. Resident Evil 3 Remake prácticamente desaparece los tiempos de carga por completo, generando casi cero penalidad por morir; la carga que hace el juego entre perder e iniciar ni siquiera te permite dar un trago a un vaso de agua y debo reconocer que es bastante agradable de sentir.
Battlefield V también carga a una velocidad muy diferente, anteriormente podía pasar varios minutos viendo la pantalla del mapa donde habría de jugar pero esta vez ingresar a la partida fue casi instantáneo.
Dragon Ball FightersZ es un juego cuyos tiempos de carga eran una lata en Xbox One S; mejoraron un poco en Xbox One X y mejoran aún más en Xbox Series X; aunque no puedo decir que desaparezcan como pasó en Resident Evil 3; aún hay loadings pero menos largos que antes y eso mejora la experiencia general.
Probé la función Quick Resume y debo decir que me agradó poder brincar de un juego a otro tan rápidamente. No sé cuánto habré de usar esa función a largo plazo pero de momento es la novedad más curiosa de la consola de 14 mil pesos; no me funcionó al pasar de The King of Fighters 98 pero puede ser porque, o es de Xbox 360, o es porque lo tenía en un disco duro externo; no lo probé tras pasarlo al interno.
Respecto del disco duro debo reconocer que me preocupa lo limitado. Yo cuento con un disco duro externo de 4 teras donde guardo mis juegos, pero siendo que ese disco duro no me proporciona la ventaja de eliminar los loadings, sospecho que de poca utilidad me será a largo plazo. Por el momento parece que rendirá al jugar juegos de Xbox One y Xbox 360 pero sospecho que se volverá obsoleto al momento de que lleguen los verdaderos juegos de Xbox Series X.
Se supone que los juegos de Xbox Series X la mayoría corren totalmente estables a 30 fps o 60 fps a 4K. En mi caso realmente no noto esa diferencia en Framerate, Resident Evil 3 me funciona igual y lo mismo para Injustice. Quizá no he comparado los juegos que debía. Como ya terminé Cyberpunk 2077 en Xbox One X no lo he probado y prefiero esperar al update real para darle otra revisión. Si conoces algún juego económico donde pueda notar la diferencia entre 30 fps y 60 fps en Xbox Series X avísame, y si dices Sekiro, muy tarde, ya tengo ese juego y no lo he jugado por lo que no puedo comparar los 60 fps de Series X con los 30 fps de One X.
En cuanto a los juegos, realmente en este momento Xbox Series X es un Xbox One X más poderoso y ya, no hay juegos específicos a jugar ahí. Puse un momento de Gears 5 y la pantalla de inicio sí se ve mucho más brillante y detallada, sin embargo el juego ahora se descarga en pedazos y resultó que no estaba descargada la campaña para hacer la prueba, sin embargo es el único juego donde noto alguna diferencia, aunque no es drástica.

Algo muy importante y que yo no sabía es que el cambio de medida de los controles afectó un detalle insignificante peor que genera un costo extra, las tapas de las pilas. Yo tenía un centro de carga Nyko para mis dos controles de Xbox One y las pilas funcionan, el centro de carga es compatible, pero las méndigas tapas no, y sólo por ello no tuve opción más que comprar otro centro de carga Nyko, actualizado para Xbox Series X, con tapas compatibles, eso sólo por ese pequeño detalle.

Como no tengo Gamepass no he jugado The Medium que dicen es el primer juego realmente para Xbox Series X, por ello debo reconocer que, tras sólo tres días de usar el Xbox Series X, no noto diferencia gráfica alguna viniendo de Xbox One X.
Del mismo modo recientemente mi Series X lanzó una pantalla verde por un segundo, un sonido tipo Atari 2600 y luego se apagó. Volvió a encender pero ya temo comience a fallar. Debo usarlo más para revisar o hacer válida la garantía.
Llevo poquísimo con el Xbox Series X, el cual representó un gasto fuerte que quizá no debí hacer, pero el hype me envolvió y hasta ahora no me ha hecho perder la resaca del comprador. Pienso que le faltan juegos con los cuales demostrar su verdadera capacidad. De momento reconozco algo a favor y es que la diferencia entre Xbox Series X y Xbox One X, en los tiempos de carga, es más notoria que la diferencia de resolución entre Xbox One X y Xbox One S y finalmente afecta directamente al juego. Si los juegos siempre cargan a esas velocidades sí estamos ante una evolución considerable, pero aún no llega el juego que me haga decir que he entrado a una nueva generación de consolas y eso, francamente, me preocupa.
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