Mes de la Navidad 2010: Creciendo Regio – Una Navidad regiomontana

 

Diciembre, el mes favorito de todo niño, donde por fin recibirá algo más que regaños, recibirá… regalos, juguetes, videojuegos… ropa, bueno no todo es perfecto. Y así es como los regios la vivíamos en los 80’s y 90’s.

NAVIDAAAAAD!!! ese es el grito de guerra de cada niño desde que empieza diciembre, todos corremos a sacar el pinito (sintético) de donde chingados esté guardado, así, todo polvoso, comenzamos a armarlo, notamos que ya le hacen falta ramas pero no importa, el regio es bien creativo para cubrir esos defectos menores. Un adorno grande ahí y listo, poner esa parte pegada a la pared y ni el mismo santa Claus se dará cuenta.


El mes apenas empieza y ya teníamos la casa totalmente decorada, nótese que por decorada no me refiero a bien decorada, por lo general, las casas parecían una especie de adorno titufruti (o sea, de muchos colores) ya que mezclábamos adornos de LO QUE SEA, en ocasiones ponía alguna tortuga ninja. Nada como ver dinosaurios de plástico en el Nacimiento y a He-Man atendiendo al nacimiento del niño Jesús, imagina que esos dos personajes se conozcan, sería una batalla épica!!!

Pasaban los días y la escuela por fin estaba por terminar, las vacaciones de invierno se acercaban, pero antes venías las posadas escolares… bueno, más bien LA posada escolar, sólo era una, y nos cobraban, y la verdad nunca me gustaron, pero de todos modos era parte del ambiente. Realmente esas posadas no eran más que tamales, coca al tiempo y quizá unas papas sabritas sabor natural (guácala). Ahora, imagina a un montón de niños, incluidos nerds y bullys, en un salón de clases, con frío a fuera y por lo mismo todo cerrado, sin maestro y con restos de comida y bebida… así es, los nerds llevábamos las de perder.

Cuando por fin iniciaban las vacaciones de invierno, ahora sí la verdadera Navidad empieza. Primeramente comenzaban a disfrutar al 100% la programación navideña de la tv que transmitía las clásicas películas de la época (ya sabes, Mi Pobre Angelito, Duro de Matar, etc) y las caricaturas navideñas como La primera Navidad de Yogui (porque es un oso y duerme en invierno), la de Scrooge de Disney (donde salen Mickey y Donald y Goofy estaba muerto y aparece como fantasma.. vaya que Diney es tétrico). Como niño, esas caricaturas eran una obligación.

Casi todo programa o caricatura tenía al menos un episodio navideño (incluso House actualmente los tiene) así que sin duda podrías ver tu serie favorita con su temática navideña.

Siendo regiomontanos, es normal para nosotros el típico viaje decembrino a Laredo, para quienes no lo conozcan, Laredo es una ciudad fronteriza de Estados Unidos y en aquellos tiempos la diferencia de costos era notable, por lo que siempre íbamos a hacer las compras navideñas allá (claro que los niños no sabíamos que ahí compraban los juguetes, creíamos que era Santa Claus, los juguetes los escondían en la cajuela y no nos dejaban verlos). Nos levantaban desde las 4 am para tomar la carretera y llegar desde bien temprano allá, evitando el tráfico el puente internacional… por desgracia todos tenían la misma idea así que siempre estaba HASTA LA MADRE!!!!.

Regresando a casa, simplemente contábamos los días para la gran fecha, fantaseábamos con los juguetes con los que próximamente íbamos a jugar. Mi mamá estaba histérica por todo el trabajo que iba a tener (ella cocina la cena navideña), mi papá, ya molesto por todo lo que ha gastado, compra los ingredientes de la cena, debería hacerlo con tiempo pero siempre deja cosas para el último momento.

Una tradición en mi casa son las hojarascas navideñas de mi mamá, son una especie de galletas con canela, gracias a eso siempre ubico el olor y sabor de la canela con la Navidad y en diciembre trato de comer cosas que contengan canela.


Me compadezco de tí que NUNCA podrás probar estas delicias que hace mi mamá

Llegó el gran día!!! no, no el 25 de diciembre, tampoco el 24, llegó el 23 de diciembre, el día MAS aburrido del año cuando eres niño. Sabes que falta apenas un día para la gran fiesta y un poco más que eso para tus regalos, por lo mismo, el 23 de diciembre se hace eterno, es como un gran calentamiento previo de 24 horas. Tratas de ver tus programas navideños y hacer tu vida normal, pero no puedes dejar de contar los minutos, era frustrante. No por nada el 23 de diciembre es el día internacional del calentamiento previo, un día dedicado para prepararte para hacer algo pero sin hacer nada al mismo tiempo.


Mira la cara de aburrimiento en mi hermana (derecha) y en mi (izq), sólo esperábamos que pasaran las horas… y NADA!!!!

Por fin!!!! 24 de diciembre, realmente este es el mejor día del año (no el 25, verás por qué). Desde que amanece, mi mamá ya está desesperada preparando las cosas, tiene que meter el pavo o la pierna de cerdo con mucho tiempo (es preparada un día antes, generalmente por mi) y comienza a preparar las guarniciones, claro, las cosas no salen como estaban planeadas y siempre faltan cosas, por lo que mi papá debe ir a las tiendas a comprarlas… tiendas, el 24 de diciembre, has jugado Dead Rising? bueno entonces sabes más o menos como es.


Aunque es una escena de Dead Rising, este hecho realmente sucedió en un Liverpool de Mty, aunque el Xbox 360 no pudo poner la cantidad real de gente que había esa ocasión… hey, tengo una camisa de cuadros como esa!!!!

En casa, mi mamá se da cuenta que, aunque tiene que preparar la cena, apenas es hora de comer!!! se desespera y se enoja, tiene la cocina repleta de cacerolas y platos y ningún sitio para preparar la comida, por lo general las opciones era que mi papá, de mala gana, nos compre comida hecha, o comer lo más raquítico que encontremos.


Adivina de que año es esta foto… si dijiste que de los 80´s, tienes toda la razón, mira esos pelos.

Mientras tanto los niños vemos tv, las caricaturas navideñas están a su tope y durarán todo el día (en alguna ocasión vi la trilogía original de Star Wars toda la tarde del 24 de diciembre, duró hasta la cena).

Llegan mi tía y mi abuela, las únicas personas que pasarán 100% la Navidad con nosotros (dependiendo el año, también mi tío Roy, hermano de mi abuela, quien murió cuando yo aún era muy chico). Mi tía ayuda a mi mamá en la cocina pero… bueno, ella es muy gritona, además de fumadora, así que entre el olor a cigarro y los gritos, te das cuenta que ya es Navidad.


Esta foto es de alrededor de 1997, mira a qué me refiero cuando digo decorado tutifruti, compara este árbol con el de las primeras fotos (de hoy).

Hora de la cena, todos estamos hambrientos, casi no hemos comido… esperen!!!! grita mi papá, “debemos ir a la iglesia a dar gracias” Así que tratas de convencer a tu estómago que deje de devorarte y nos lanzamos a la iglesia habitual para la misa de Navidad. La verdad, yo no creo en nada de eso, pero de algún modo disfruto la misa de Navidad, es parte de la tradición. Pasando frío, soportamos la más de una hora de misa y volvemos a casa para darnos cuenta que… NOS HAN ROBADO!!!! no, no es cierto, afortunadamente eso no ha pasado… aún.

Hora de cenar!!! qué? aún no? cierto, sigue el tradicional juego del dado y los regalos, este juego consiste en que la familia (incluidos los hijos) compra regalos baratillos y los envuelve, nadie sabe lo que el otro compró. Nos reunimos en la mesa con un dado y gritamos par o non, y si sale lo que gritaste agarras un regalo, ganes algo o no, pasas el dado al de la derecha, así hasta agotar los regalos.

Después, cuando ya no hay regalos, seguimos jugando pero le quitas el regalo a cualquiera que ya lo tenga (si sale lo que gritaste claro) comenzando la típica lucha por los regalos que parecen mejores, mi hermana menor comienza a llorar porque no gana nada y se enoja. Finalmente acaba el juego y vemos las porquerías que nos ganamos (hey, dije que son regalos baratos). Una ocasión puse una popó de perro, jajaja, fue genial, pero me regañaron.


Por poco no agregaba esta foto de mi mamá y mi papá, ya me reí del árbol pero lo importante es que: HEY!!! tengo una camisa de cuadros como esa!!!!

Hora de cenar (ahora sí), mi papá se enoja porque dice que olvidamos lo que en verdad es la Navidad, el nacimiento de Santa… bueno, chiste de Los Simpson, el nacimiento de Jesús (ha repetido eso cada año) y obliga a demorar unos minutos más la cena para hacer su oración donde critica a su familia por ingratos. Mientras tanto, mi mamá y mi tía calientan TODA la comida en el microondas ya que, obvio, se enfrió (todo por hacerla con TAAANTO tiempo), haciendo batideros legendarios, finalmente sirven los platos y comenzamos a cenar.

Por lo general la cena tiene buen sabor, aunque una vez el pavo estaba previamente echado a perder (fue horrible). Acaba la cena y llegan algunos familiares (en alguna ocasión vamos nosotros pero no es común), los familiares nos dan el abrazo, nos dan algún regalo y pasan a platicar entre adultos. Como en aquel tiempo nosotros éramos los más pequeños de la familia, realmente a nosotros nos daba lo mismo y sólo queríamos irnos a dormir para abrir nuestros regalos al amanecer.


Una escena clásica de estas reuniones familiares, en realidad solo desean que este infierno acabe.

Después de desvelarnos hasta las 4 am, a las merititas 5 am ya estamos despiertos, bajamos las escaleras a oscuras y buscamos nuestros regalos y…. NADA!!!! bueno no es cierto, siempre tuvimos regalos (aunque una vez envueltos en periódico, mi papá es muy codo). Me doy cuenta de que no me trajeron lo que pedí (la colección de G.I.Joe) y que las Tortugas Ninja son pirata. Aún así nos ponemos a jugar mis hermanas y yo toda la mañana.

Entre los regalos más importantes que recuerdo, están las tortugas ninja (aún piratas), mi Snes (maldito viaje en el tiempo, no lo pude recuperar, pero ya tengo sustituto) con el Street Fighter 2, el juego de Art of Fighting (algunas navidades después), un Dino Rider (el más chafa pero algo es algo, me encantaba). Los grandes ausentes siempre fueron los G.I.Joe, Transformers, Dino Riders grandes y en general, los juguetes más caros.

Para la 1 pm, los juguetes estaba olvidados por toda la sala y volvíamos a la vida normal a comer sobras, llegaba mi tío Silvino (Q.E.P.D.) y nos daba carritos hot-wheels y chocolates (cuando crecimos lo cambió a corbatas y calcetines… dentro de termos… y con algunos chocolates adentro).


Mi tío Silvino en sus visitas del 25 de diciembre, te extrañamos tío

Más o menos así era la Navidad para un niño regio común, al menos lo era para mi. Mucha histeria, algunos enojos, pleitos, pero al mismo tiempo, divertidas, siempre trato de que las cosas vuelvan a ser así en estas fechas.

Actualmente la tradición no ha variado mucho. Sólo que, obviamente, ya no tenemos regalos, de hecho ahora nosotros, los hijos, damos los regalos (y no es divertido), para cuando acabamos de cenar pasamos a abrir los regalos (ahora ya nada de irse a dormir y levantarnos para ver la sorpresa), muchos de los regalos ya estaban dados con anterioridad por lo que ya sabemos que son. Y finalmente nos vamos a dormir porque tengo que trabajar al día siguiente (maldito periódico). Ya de adulto, el día más aburrido es el 25 de diciembre puesto que todo está cerrado (salvo mi trabajo) y como ya no estás jugando con NADA (nunca me han dado a la Kristen Stewart que pido) en realidad pasas el día vegetando y tragando como cerdo todo lo que haya sobrado. Tristemente ya no tenemos a mi tío Silvino por lo que la dosis de chocolate se verá reducida (bueno, al menos serán menos calorías). Y la vida continúa su curso normal. No cabe duda que la Navidad está hecha para los niños y sin niños en casa (ni mis hermanas ni yo tenemos hijos) las cosas no son como antes. A ver si algún día volvemos a lo que tanto nos gustaba porque, si hubiera niños en casa, yo me divertiría tanto como ellos.

En otros cambios, ahora soy yo quien va de compras a la tienda de último minuto y ayudo a limpiar y acomodar las cosas, fuera de eso (y que gasto más de lo que recibo) las cosas son similares, aunque la magia no es la misma. Pero eso se arreglará si algún día llegan niños a la familia.

Feliz Navidad a todos, feliz Navidad Tío Silvino, te extrañamos

Hora de la verdad, la razón por la que vale la pena leer este artículo, sí, lo que siempre soñaste, una foto mía con el pelo largo y gordo.


No mamen que pinche foto es esta!!!!!! AHHHHHH. Bueno, al menos sale mi perrita (la french blanca a la izquierda), pero… que pelos!!!!!

Ok, para demostrar que los años fueron benévolos conmigo aquí está una foto de la Navidad del 2008 (no encontré las de la anterior pero prometo agregar las de este año tan pronto llegue el día)

Terminamos este artículo viendo al mejor regalo de Navidad que he recibido:


Esta es Kokis, fue un regalo de Navidad en 1996, costó 300 pesos, y ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida, yo no la quería originalmente (no me importaba más bien) pero supo ganarme y ha estado conmigo desde entonces (traté de tomarle una foto hoy pero no se quedaba quieta)

Quien a su vez me regaló otro obsequio excelente:


Esta es Suiry, hijita de Kokis, nació en febrero de 1999 y al igual que Kokis, es una de las mejores cosas de mi vida. Ésta sí se dejó fotografiar hoy pero en esta foto se ve mucho mejor

Y estas perritas llevaron a tener también a estos:


Fox, el único de nuestros perros que trabaja (se coje perras y cobra)


Nala, una Chihuahua que aún no cumple 1 año, llegó de visita pero mi mamá no quiso desprenderse de ella.

Y ahora sí cerremos recordando a aquellos seres queridos (personas y mascotas) que ya no están con nosotros:


A la izquierda El Chato, era un perro callejero que un día (por ahí de 1998) llegó a nuestra cochera, flaco y herido, mi mamá le dio de comer y nunca se fue. Murió,al parecer de viejo, en el 2003 mientras dormía. A la derecha Tochi, una boxer que nos dieron en febrero de 1999, preciosa y muy cariñosa, se enfermó del corazón y comenzó a retener líquidos (estaba tan hinchada que no podía levantarse), por consejo del veterinario, la pusimos a dormir en 2009, la cosa más difícil que he hecho en mi vida (hasta hoy)


A la izquierda mi tío Silvino, murió apenas a finales de septiembre de 2010 de forma sorpresiva. Al centro mi tío Checo, hermano de mi mamá, murió en diciembre de 2009 a causa de cáncer. A la derecha mi tío Homero, hermano de mi papá, murió, creo que en 1988, a causa de un ataque de asma.


AHHHHHHH!!!!

Enhanced by Zemanta
Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Login
Cargando.
Registrarte
Cargando.