La generación del PS4 y el Xbox One nos dejó muy clara una cosa, que PS4 tenía mejores juegos exclusivos, sin embargo esa afirmación no es del todo cierta pues, si bien sí son mejores, sería necesario colocarle comillas ya que la diferencia de calidad es marginal.
Compré mi PS4 precisamente para jugar los juegos exclusivos de la consola y en su mayor parte he quedado decepcionado. God of War, The Last of Us Part 2 y Final Fantasy VII Remake me encantaron, mientras que Detroit Become Human y Marvel´s Spiderman me gustaron lo suficiente para terminarlos, sin embargo otros títulos como Killzone Shadowfall, The Last Guardian, Dragon Quest 9, Until Dawn, Uncharted 4, Infamous Second Son, Horizon Zero Dawn y Ghost of Tsushima me dejaron un sentimiento de decepción pues, sin ser malos juegos, no son para nada joyas del gaming y la mayoría me forcé a terminarlos o incluso los dejé por lo aburridos. Ghost of Tsushima pertenece a esta última categoría.
No puedo entender cómo tantas personas comentaban que Ghost of Tsushima era un GOTY, no tiene absolutamente ningún aspecto redimible, salvo quizá sus gráficos, y ellos no son nada del otro mundo comparado con juegos como Doom Eternal o Gears 5 en el Xbox One X. Ghost of Tsushima es un juego de mundo abierto que reúne todos los clichés de juegos de mundo abierto pero le quita elementos que lo hagan divertido.
Es un juego vacío, así de simple, corres por las praderas viendo nada, siguiendo ráfagas de viento hasta destinos que no aportan nada de interés. Ocasionalmente enfrentarás algunos sencillísimos enemigos y recolectarás cantidades industriales de madera y recursos que nunca serán suficientes pues necesitas muchísimas unidades de éstos para hacer mejoras inútiles para equipo innecesario.

El sistema de combate de Ghost of Tsushima es su mejor elemento y realmente pensé que tenía potencial, sin embargo conforme más tiempo jugué menos me atrapó dicho sistema que queja lejos de otros como Sekiro, Shadow of War o The Witcher 3. En Ghost of Tsushima no hay estrategia, sólo es golpear y bloquear sin técnica, si bien existen 4 posturas diferentes, todas se juegan igual y el chiste es únicamente cambiar la postura adecuada para el tipo de enemigo adecuado, espamear el botón de defensa y listo, avanzarás en el juego sin problemas.

En juegos de mundo abierto el trayecto es clave puesto que pasarás la mayor parte del tiempo recorriendo praderas, bosques o desiertos. Infamous lo hacía divertido gracias a la multitud de habilidades para trasladarte a alta velocidad mientras que The Witcher 3 hacía lo propio mediante combates tensos que debías elegir (al menos al comienzo), y zonas geográficas que narraban visualmente una historia. Ghost of Tsushima no tiene nada de eso, sólo es correr hasta llegar al punto marcado, luego es seguir algunas pistas evidentes para volver a correr, pelear contra enemigos facilísimos y listo.

La historia es la genérica de venganza: “Salva a tu ser querido, venga a tu tierra”, y el protagonista, Jin Sakai, es uno de los personajes más aburridos y menos interesantes que he visto en un videojuego. Además no es más que el mandadero de Tsushima pues todos le piden favores que Sakai hace inmediatamente. Si bien esto es el mal de todos los juegos de mundo abierto, Sakai lo lleva a un nivel avanzado de docilidad pues hace lo que le pidan por más intrascendente que sea.
Todo lo anterior son males comunes de este género pero se incrementa con el hecho de que no hay nada bueno que encontrar. No hay variedad de armas más allá de la katana y sus mejoras invisibles, existen varias armaduras pero sin accesorios de interés, mientras que las máscaras, cascos y bandanas son simples detalles cosméticos.
Quizá el problema fue jugar Ghost of Tsushima después de Sekiro pero me encontré con un juego altamente decepcionante. Mientras que inicié odiando Sekiro por su dificultad, poco a poco el juego hizo clic y me motivaba a avanzar hasta acabarlo, veía estrategias y pensaba en la manera de superar a algún enemigo difícil. Ghost of Tsushima no hizo nada de eso, de hecho está matando mi placer por los videojuegos, por eso decidí dejarlo empezado tras varias horas de juego al darme cuenta que no iba a cambiar. Es por eso que considero que Ghost of Tsushima está totalmente sobrevaluado y es quizá el PEOR exclusivo de PS4, al menos de los que he jugado.

Ahh y hay que añadir que el doblaje latino una vez más es hecho en Argentina, después de lo que había avanzado Sony con otros juegos se regresa a las malas costumbres, aunque he de reconocer que ha mejorado con respecto de lo visto en Infamous Second Son, sigue siendo inferior que el de otros títulos doblados en México.
Deja una respuesta