Eran buenos tiempos para los Otakus mexicanos, la invasión anime estaba en su apogeo en los canales de televisión abierta, con Canal 5 y Azteca 7 como sus principales exponentes, ambas televisoras repartiéndose incluso los horarios puesto que las mañanas y los fines de semana eran de Azteca, mientras que las tardes y noches de entre semana pertenecían a Canal 5, y los otakus estábamos contentos así.
Soplaba un viento favorable puesto que el anime se volvía cada vez más accesible, si bien a veces tuvimos algunas pifias como Ninja Kabuto y Ge Ge Ge no Kitaro, en general el anime en México estaba mejor que nunca y ahora la tv de paga también decidió involucrarse.

Cartoon Network trajo Gundam Wing, Samurai X e Inuyasha, Fox se sumó a la pokemanía con Monster Rancher y Digimon, llevando al anime a un camino infantil que no me gustaba, e incluso los canales menos populares, como Canal Once, trajeron Patlabor, que la verdad estaba interesante.
Sin embargo un día algo cambió, las barras de anime comenzaron a desaparecer: Canal 5 puso shows de Nickelodeon en los horarios que antes eran de anime, TV Azteca metió en su lugar un bloque de caricaturas Disney, incluso Fox Kids cambió de nombre a Jetix y, con eso, muchas de sus series comenzaron a irse hasta finalmente desaparecer.

¿Qué pasó?
La realidad escapa a mi conocimiento pues no me he dedicado a la industria televisiva de ninguna forma, simplemente puedo decir lo que se habla en redes y la experiencia propia al ser un televidente en aquella época. Si bien los rumores, el «Efecto De la Vega», son solo dichos de la gente, en realidad sí se vivió una sacudida en el anime que fue abrupta y nos dejó sin anime de la noche a la mañana.
Empecemos con el rumor. Se dice que todo comenzó con el programa Hablemos Claro, de Lolita de la Vega, en el cual la mencionada comenzó a realizar diversos ataques en contra del anime, todo ello fundamentado en el hentai que llegó a sus manos.
En ese fragmento que podemos ver es claro que Lolita de la Vega hablaba desde un completo amarillismo y desinformación, así como desde una tendencia conservadora que la llevó a una inclinación totalmente contraria al tema que muy superficialmente pudo analizar.
Lolita de la Vega mostró algunos mangas del género hentai que, en efecto, existen, sin entrar en detalle de que esos mangas son obras independientes que no tienen relación con el anime o manga comercial de Japón. Lolita de la Vega los hojea, dando la impresión de que pensara que esos mangas eran desarrollados por los mismos creadores del manga comercial.

Asimismo De la Vega alarmó a la población al decir que ese manga había llegado a México (lo cual era cierto) mostrando una portada sexy de Conexión Manga pero SIN HOJEARLA. Así como interpretando de manera sumamente sesgada los argumentos del manga, por ejemplo, hablando de Evangelion y expresando que era un anime «SATÁNICO» e invitando a «expertos» tendenciosos hacia la religión quienes interpretaron personajes, nombres y diseños como paganos u «ocultistas».
Sin entrar en detalles sobre lo que se habló en ese programa, se dice que el efecto social llegó a un grado en que los padres de familia comenzaron a quejarse respecto a la temática de las caricaturas.
Desconozco realmente si Lolita de la Vega pudo, con su programa, realmente motivar a que el anime comenzara a retirarse de la televisión abierta de México, pero como televidente sí se sintió una gran modificación. De pronto barras completas dedicadas al anime dejaron de transmitirse y fueron sustituidas por caricaturas de corte más familiar, como las de Disney; mientras que en la tv de paga , si bien el camino fue más lento y todavía a mediados de los 2000 podíamos ver anime, se notaba una clara tendencia a un tipo de anime distinto, con exponentes como Yugi Oh, Shaman King, Beyblade y los mencionados Monster Rancher y Digimon.

Así fue como el anime comenzó a irse de México. Si bien aun quedaban algunos resquicios aquí y allá, para nada se movía con la intensidad de antaño. Incluso la Saga de Hades no fue capaz de mover a México como la serie original lo hiciera en los 90s y, aunque se transmitió por TV Azteca, los horarios fueron tan irregulares que realmente era difícil darle seguimiento televisivo.
Quizá me equivoco, quizá el anime no murió por el «Efecto De La Vega», quizá simplemente fuimos nosotros, los televidentes, quienes nos interesamos por otras cosas. Yo ya tenía 20 años para el momento que el anime comenzó a retirarse y claro que mis intereses y tiempo libre se vieron afectados. Tal vez eso mismo nos pasó a muchos al mismo tiempo y nosotros, nuestra edad, fue el verdadero detonante de la salida del anime.

Aunque creo que es probable, no podemos negar que la salida de los bloques televisivos fue real. Pareciera que se dio la tormenta perfecta en que el «Efecto De la Vega» pegó justo al momento en que los fans estábamos en otra cosa y, con ello, el anime dejó de ser rentable.
Pero ese no fue el final, eso lo veremos próximamente.
Recuerdo una vez que le prendí para ver B’t X y en su lugar estaba una caricatura de Disney llamada El Recreo. Y si, fue como dices, poco a poco empezó a desaparecer el anime de la tv abierta.
Ese programa de De la Vega salía, creo, que a la media noche, no creo que eso fuera la causa de que quitaran los animes. Porque aún asi salieron al aire Pokemon, Digimon, Beyblade, Yugi Oh, Medabots, Doremi, Sakura Card Captors, Doraemon, y ya como en el 2005 el Barón Rojo e Inuyasha, hasta Escaflowne volvió a salir.
Tal vez si fuimos nosotros los televidentes que crecimos y nos quedaba menos tiempo libre para ver, o lo que estaba ya nos parecía muy infantil para nuestros gustos.
No creo que haya sido el mentado «efecto Dela Vega» más bien las televisoras tenían un mugreral con los horarios, más que nada Tv Azteca que a veces veías un anime a cierta hora y cuando lo querías sintonizar de nuevo al día siguiente a la misma hora, resulta que ya no salía, en su defecto salía futbol o algún capítulo de alguna novela random, el asunto con el anime siempre fueron las licencias, a veces animes con 13 capítulos eran muy costosos como para traerlos y nomas pasar 13 capítulos, no tenía sentido, creo que solo pasaron animes de 50 caps en adelante por lo mismo , porque aparte era pagar licencia, doblaje y publicidad, luego para que no pegara el anime, pues le pensaban mucho, tiene años que no sintonizo tele abierta, la verdad no sé como ande hoy en día su barra de entretenimiento, lo bueno de ahora es que vemos lo que queremos cuando queremos y cuanto queremos. saludos.