Algo me quedó claro cuando me mudé a Saltillo, Monterrey rulea, sí, mi ciudad natal es la mejor del mundo y Saltillo es un chiquero. Pero también me di cuenta que lo que en Monterrey damos por hecho en otras partes es… raro. Así que bienvenidos al mundo de Creciendo Regio, donde los viejos regiomontanos podemos recordar aquellos buenos tiempos y aquellos que tienen la desgracia de no ser regios pueden saber lo que se siente.
Crecer en Monterrey no es fácil, hace MUCHO calor, hay muchos bullys y es la ciudad donde se debe ahorrar cada peso, sólo por el hecho de ahorrarlo. Por lo mismo, ser un niño nerd de clase media era pues… no muy bueno. Si querías juguetes, videojuegos o lo que sea, te costaría trabajo obtenerlos.
Mi pastel del 5to cumpleaños y yo, asiando comerlo, me costó mucho trabajo encontrar esta foto así que disfútenla o se arrepentirán. Por cierto, a mi NO me gustan los pasteles blancos, solo de chocolate. Actualmente tengo 29 años –yo– así que esta foto es del 8 de mayo de 1986
Pero había dos momentos en que el niño regio podía obtener cosas, uno era la Navidad, el otro su cumpleaños, pero la celebración del cumpleaños era algo… diferente.
Preparándome para mi cumpleaños junto a mi hermana Naye, lo que me importa de esta foto no es la preparación sino esa sudadera, como la extraño, quiero otra YAAAA!!!! Esta foto demuestra que era nerd desde antes de los videojuegos.
La piñata
Al mexicano se le estereotipa en el mundo por el uso de las piñatas… sí, las usamos de vez en cuando, en los cumpleaños son típicas (al menos en Mty). En aquellos lejanos años 80´s cuando se acercaba la fecha de tu cumpleaños, tu mamá se daba a la tarea de comprarte la piñata de tu personaje favorito, en estos días actuales lo común es un Bob Esponja o un Pokémon, por lo que los adultos del futuro serán homosexuales, pero en los 80´s la piñata era de Mazinger, de He-Man, de… los pitufos… en fin, eran personajes de calidad a los que tú, sí, TU, el niño cumpleañero, asesinará a palazos hasta destrozarles las extremidades y sacarles todo lo que tengan por relleno.
La piñata de uno de mis cumpleaños, donde molimos a golpes al hombre más fuerte del universo. No sé donde demonios estaba yo pero era mi cumpleaños. La casa aún no estaba terminada (y nunca se terninó, mi papá no quería gastar)
Así es, las piñatas tienen relleno, y en Monterrey es parte muy importante, generalmente ese relleno está compuesto por los sobrantes de las «bolsitas» (hablaremos de eso después) y en una piñata de un niño nerd de clase media ese relleno consistía de muchos, MUCHOS cacahuates enteros (porque es lo más barato), algunas mandarinas (100% golpeadas al caer), y variedad de dulces de muy baja calidad comprados en los mercados más mugrientos de la ciudad (hablaremos meas a fondo de ellos más adelante).
Básicamente cuando desmembrabas la piñata su contenido caía al piso y se iniciaba la guerra por obtener lo mejor del botín (evitando cacahuates y mandarinas), esta parte de la fiesta incluía golpes, patadas, muchos niños llorando por no alcanzar nada y quizá algunos muertos. Si eras el niño nerd no podías competir contra la fuerza descomunal de tus primos bullys así que te quedabas sin nada a menos que una de tus tías te diera algo.
Las bolsitas
Vaya que es un problema enseñarle a los No Regios qué es esto… al parecer somos los únicos en el mundo que le llamamos de este modo.
Las bolsitas son… bolsitas, de plástico, que contienen dulces (como dije, de pésima calidad) y que se entregan al final de la fiesta a los niños que ya se van. En Saltillo las conocen como bolos pero como son saltillenses están equivocados en todo lo que hagan por simple definición.
Pues bien, las bolsitas son una de las mejores partes de ir a un cumpleaños puesto que, si eres invitado, realmente ganas algo por ir a la fiesta de ese niño serio y aburrido que a nadie cae bien. Y son el horror de los padres de ese niño puesto que, además de pagarlas, hay que llenarlas, lo que es una tarea larga y tediosa.
Rezabas porque no te salieran tantos cacahuates
Las bolsitas contienen diferentes dulces, por lo general de calidad cuestionable puesto que al ser necesarios muchos de ellos, lo más barato era comprarlos a granel, así que rara vez eran de marca, los más comunes eran:
– Cacahuates
Sí, simples dulces naturales que no son nada dulces, aceitosos y engordaderos, son baratos y resisten los golpes (deben venir con todo y el cascarón), en feneral forman parte del grueso de la bolsita y son los que le dan el peso, los niños los descartaban y quedaban tirados en el piso del patio.
Estos eran los cacahuates incluidos, no los sin cáscara, esos son demasiado caros
-Mandarinas
Más dulces naturales, las llamadas naranjas de los pobres, gracias a su peso y tamaño, cuando estaban dentro de la bolsita cerrada daban la impresión de que el contenido sería suculento, al abrirla verías que ese peso estaba conformado por cacahuates y una mandarina y recordabas por qué nadie quería a ese niño. Por lo general eran usadas en guerras de alimento como armas de destrucción masiva que tendían a lastimar al cumpleañero (y el ácido cítrico era excelente para el segundo impacto).
-Fritos rojos sin marca
Estos son unos fritos con supuesto chile que no pica ni madres. Se supone son de lo sabroso de las bolsitas pero eran más corrientes que una prostituta cumbrera de 30 años. Sí eran comidos.
Estos fritos los tengo ACTUALMENTE, tuve que escanearlos para más comodidad, no pican nada y son de lo más corrientes que existen
-Chiclosos
Dios mío, ODIO estas cosas, son el peor invento de la industria confitera y muy, MUY comunes en Monterrey. A primera vista parecen chicles, lo cual no es malo, pero al momento de abrirlos es cuando te pega la realidad, el niño lo bastante idiota para consumirlo creyendo que eran goma de mascar lo recordará toda su vida.
El horror
Básicamente estos inventos de satán son una especie de chicle no masticable que se pega en el paladar y los dientes y cuyo sabor tiende a ser más bien lechoso. Son odiosos y a nadie le gustaban. Existen los frutales, los de chocolate, de cajeta y varios más, pero todos son horribles. Eran consumidos por accidente pensando que eran chicles.
-Chicles Totito
El chicle regio por excelencia es este, el totito, este es un dulce destruye mandíbulas de tamaño considerable. Originalmente de sabor tutifruti, que significa que está compuesto de los restos de otros chicles de otros sabores así que no sabe a nada que exista. Su color es rosa y la verdad, sabían muy bien.

A veces teníamos la suerte de tener totito de plátano o de uva, muy buenos, de hecho tengo algunos de uva en casa en estos momentos y fueron los que me inspiraron a escribir este artículo. Eran consumidos y sus restos usados en la batalla de alimentos con salivosas consecuencias.
-Paleta de cajeta
GUACALA, horrorosa paleta que intentaba tener sabor a cajeta, a algunos niños les gustaba pero yo la cambiaba por mejores dulces

-Paleta payaso Ricolino
Este es un clásico regio pero a mí nunca me gustó, es una paleta de bombón cubierta de chocolate y con ojos de gomita, bastante grandes, solían ser de las más preciadas en los cumpleaños. A mí no me gustan los bombones así que sólo le extraía quirúrgicamente el chocolate dejando el cuerpo bombonoso bastante babeado tirado en alguna parte.
Que gran forma de arruinar el chocolate
-Paleta de maíz con chile
Vaya estas sí estaban buenas, son paletas con forma de elote cubiertas de chile, muy sabrosas y te dejaban con dolor de estómago.

-Paleta de coca cola
Esta era muy rara, en sí es una paleta sabor coca cola.
-Chocolates Tinlarín/Carlos V
El santo grial de las bolsitas eran estos, los chocolates, lo que todos queríamos. El Larín es galleta cubierta de chocolate por lo que apesta pero el Carlos V es una barra 100% chocolatosa, algunos la chupaban poco a poco en un intento de darle forma fálica y aprender para el futuro, yo como sí soy bien hombre comía el chocolate a trozos (sin albur).
Actualmente el diseño es diferente, así eran vendidos entonces
-Duvalín
El irrita estómagos por excelencia, esta cosa es un pudín mitad chocolate mitad vainilla que viene con una palita, yo sólo me comía lagartee de chocolate.

La comida
Las bolsitas venían al final y si no eras lo bastante fuerte no obtendrías nada de la piñata, pero no te preocupaba porque siempre tenías la comida de la fiesta.
Podían ser muchas cosas pero lo típico eran chilli dogs bien fríos con papas fritas (de bolsa botana) y coca bien caliente. Los chilli dogs son una especie de hot dogs con frijoles, la salchicha en trozos, chorizo y carne molida y te dejaban la cara más sucia que una prostituta de 14 años en un putero de mala muerte. Aunque de muy buen sabor.
Haciendo investigación para este artículo, encontré que el chili dog es un hot dog cubierto de chili, en Mty no usamos la salchicha entera sino que es cortada en trozos y revuelta con el chili y frijoles
Otra comida común eran los hot dogs, tostadas, duritos (chicharrones con salsa botanera) pero nada tan icónico como los chilli dogs.
Claro había pastel, para mi SIEMPRE debía ser de chocolate, no me gustan de otro tipo (bueno, me agradan de nuez o de zanahoria, pero PUROS colores terracota, nada blanco o azul ni de esas cosas). Por lo general solo había UN pastel, mediano, por lo que la rebanada era bastante pequeña.
El espectáculo
Si a tus papás les había ido bien, quizá contrataban payasos, en aquellos tiempos lo mejor eran Los Vips, Betín o Pipo si eras millonario, si no, pues payasos pedófilos y genéricos estaban bien. Por lo general su función era asustar a los más pequeños y traumatizar de por vida al cumpleañero humillándolo frente a todos obligándolo a participar en el juego de las sillas quedando siempre sin silla y perdiendo. El payaso humillaba a los niños y los hacía miserables, y los papás le pagaban por eso!!!!
Los Vips, posibles pedófilos
Muchos niños traumados, amistades destruidas y padres sin dinero dejaban los cumpleaños, pero los payasos eran de lo peor.
Los regalos
Lo UNICO que al cumpleañero le importaba era esto, los regalos, eran su fuente de juguetes o videojuegos hasta Navidad, es más, querías que sólo llegaran a darte los regalos y se vayan a la chingada, no te importaban los «amigos» a los que sus papás obligaban a ir a tu fiesta o tus primos igualmente obligados, tú sólo querías los regalos y punto.
Los Invitados
En teoría invitas a tus amiguitos, pero si eres nerd (y lo eres), no tenías muchos, por lo que tu fiesta se llenaba de tíos, tías, primos que te molestaban y sí, alguno que otro amigo nerd.
A la izquierda está sentada mi abuelita y de pie mi tío Silvino, se le mencionará mucho en los creciendo regio, a la derecha, diversos invitados, primos la mayoría.
Espero esta visita por los recuerdos regios te haya sido de utilidad y nos estaremos leyendo en más Creciendo Regio donde platicaré de más costumbres de la ciudad de Monterrey
Esta foto no tiene NADA que ver pero mi hermana menor quería salir en el artículo, a la izquierda yo antes de romperme la nariz en un choque (mi papá no me llevó a checar), al centro mi hermana Emyli y a la derecha mi hermana Naye, yo tendría unos 6 años.
te odio >_< siempre caigo con tus tweets!!!
Primero dejame romper tu burbuja, aqui (cd Juarez Chihuahau) tambien les llamamos "bolsitas" a las bolsas de dulces, en casi todo lo que mencionas son iguales los festejos de cumpleaños, aunque ahora ya son padres tramposos y pagan por salones de fiestas o en restaurants, siempre me han gustado mas que sean en las casas XD
LOLZ con los pasteles
Pero no importa que sean post viejos, son tan buenos que pueden leerse infinitas veces
Pues actualmente vivo en Saltillo y aca les llaman bolos a las bolsitas, uno esperaria que estando tan cerca de mty las diferencias fueran menores